Existen varios tipos de datos que pueden ser recogidos para ayudar a los hidrólogos a predecir cuándo y dónde podrían ocurrir las inundaciones:
- Monitoreando la cantidad de lluvia que ocurre en tiempo real.
- Controlando la tasa de variación del nivel del río en tiempo real, lo que puede ayudar a indicar la gravedad y la inmediatez de la amenaza.
- El conocimiento sobre el tipo de tormenta que produce la humedad, tales como la duración, la intensidad y extensión del área, puede ser valiosa para determinar la posible gravedad de las inundaciones.
- El conocimiento sobre las características de la cuenca de drenaje de un río, como las condiciones de humedad del suelo, temperatura del suelo, la capa de nieve, la topografía, cubierta vegetal, y el área de tierra impermeable, pueden ayudar a predecir la extensión y daños de la inundación.