Por: Ospina-Suárez J.S.
El presente texto contiene algunas consideraciones sobre la importancia de escribir textos que aborden la temática de los recursos hídricos, haciendo énfasis en los elementos técnicos y científicos que deben caracterizarles. Los aportes aquí plasmados se basan en recomendaciones de Jeff McDonell, Demetris Koutsoyiannis, Günter Blöschl y Niko Verhoest, autores que han realizado presentaciones sobre el tema en distintas versiones de la Asamblea General de la Unión Europea de Geociencias y que cuentan con experiencia en contextos tanto académicos como de consultoría en el área. Inicialmente se presentan recomendaciones para la planificación de los textos. Posteriormente se enuncian algunas pautas para la redacción de su contenido y finalmente se exponen algunos puntos relevantes para la publicación de estos.
1. Recomendaciones para la planificación de los textos
Son tres las razones principales por las que se escribe un texto académico: la primera porque este constituye una evidencia de un proceso de investigación; la segunda porque estos son instrumentos comunicativos propios de la comunidad científica y la tercera porque estos permiten ampliar el historial profesional de los autores, siendo estos últimos aquellos quienes plasman los resultados de sus procesos y los difunden a través de este tipo de textos.
En el área de los recursos hídricos, los artículos cobran relevancia siempre y cuando se destaquen por presentar el análisis de un gran número de datos, ya sean temporales o espaciales, dándoles significatividad estadística; porque presentan técnicas robustas aplicables a un gran número de situaciones; porque presentan técnicas aplicadas a situaciones particulares en las que la limitante es la disponibilidad de los datos logrando altas representatividades con poca información; o porque la aplicación tiene una gran repercusión en el contexto en que fue implementado el estudio.
Una vez escogido el punto relevante del estudio, se recomienda definir el mensaje central que ha de ser transmitido con el texto. Este debe convertirse en un elemento orientador para los demás elementos del texto, especialmente para el título, las ideas principales del contexto, los métodos y datos, los resultados y la discusión, deben aparecer en el resumen. Cuando se hayan definido tanto el título como el resumen, se recomienda definir una revista para publicarlo teniendo en cuenta que muchas de estas hacen exigencias específicas a los autores y tienen enfoques en temáticas distintas. Algunas apreciaciones sobre las revistas y sus temáticas pueden ser consultadas en (Blöschl, 2011).
2. Recomendaciones para la planificación de los textos
En general un buen texto se caracteriza por la claridad de las ideas expuestas gracias al uso conciso del lenguaje direccionado al público específico al que el texto puede resultar de interés y por el conjunto de aportes relevantes que hace a la teoría en un campo del conocimiento. Para definir el contenido del texto se recomienda emplear un enfoque descendente en el que se definan títulos para las secciones y subtítulos en cada apartado hasta que se llegue a ideas lo suficientemente específicas para que estas puedan ser desarrolladas de forma breve en secciones del texto.
En la mayoría de ocasiones, las secciones de un artículo científico son además del título y el resumen, la introducción, la recopilación de antecedentes y descripción del área de estudio, los métodos, los resultados, la discusión y las conclusiones. Durante la escritura del cuerpo del texto debe recordarse la inclusión de citas textuales, que buscan ampliar la idea de fiabilidad del texto y para manejarlas recuerde que debe haber un balance entre la especificidad y el número de citas, pues es de esperar que, mientras más generales sean las ideas a las que se hacen referencia, sea menor el número de citas y que, conforme se vaya haciendo más explícito el problema, se amplíe el número de referencias para justificar el método de abordaje, contrastar los resultados con la teoría y concluir frente al fenómeno estudiado.
3. Puntos relevantes para la publicación
La publicación en revistas científicas tiene como un procedimiento guiado por la revisión de pares como método para validar el conocimiento y asegurar la rigurosidad de la información presentada, lo que se convierte en evidencia del espíritu de cooperación académica en la comunidad científica. Inicialmente, el texto presentado a la revista es remitido a los revisores quienes se centran en identificar oportunidades de mejor aspecto en forma, asociados al uso del lenguaje en el texto y de manejo conceptual que se relacionan con los elementos teóricos de cada campo del conocimiento específico. Como resultado de las revisiones, a los textos se les hace revisiones menores, revisiones mayores o definitivamente se rechazan.
Una vez el autor reciba las observaciones, es necesario que las responda lo más rápido posible sobre el texto y redactar una carta al editor en la que se especifique punto por punto las acciones realizadas en torno a las recomendaciones que plantean los revisores. Esto acelerará el proceso de publicación que tarda aproximadamente dos años entre la primera remisión del texto y la aparición en la edición impresa de la publicación.
En resumen, la escritura de textos científicos es una tarea que requiere de práctica y su éxito depende de la concisión lograda a la hora de producir un texto. Esta situación se alcanza cuando se domina la técnica frente al uso del lenguaje y cuando se tiene un conocimiento claro frente a los problemas que se abordan en el estudio descrito mediante el artículo. Por ende, un autor, además de mantenerse actualizado frente a los problemas del conocimiento de su área presentados en la literatura científica, debe procurar mantener un estilo propio y original, que le brinde relevancia a su trabajo y para ello no existe una receta, por lo que tanto leer como escribir buenos artículos es más útil que leer textos sobre cómo escribir artículos (Koutsoyiannis, 2010).